¿Viste cuando querés decir algo pero alguien lo escribe primero y mejor? Ayer, Jorge Fernández Díaz escribió sobre la polarización de la sociedad argentina y, aunque recomiendo toda la nota, este párrafo me gustó como motor para empezar la semana tratando de no irnos a los extremos que sólo dividen:
Quienes no aceptamos los blancos y negros, y nos parece que anatematizar al Gobierno y a la oposición sin tomar lo mejor de unos y otros, insulta verdaderamente la inteligencia. Quienes aceptando las fisuras tratamos incluso de coser algunas partes para que la herida expuesta entre los dos países no sea tan maniqueísta ni irreductible. Quienes no queremos que triunfe la lógica patria-antipatria y resistimos la idea de que para terminar con el canibalismo no hay que comerse al caníbal. Quienes, en fin, queremos que nos dejen pensar, nos hemos convertido en peligrosos enemigos del Estado y también de sus místicos antagonistas. Tibios que vomitará Dios. Idiotas útiles del poder o de la oposición, según convenga a ambos lados de la estupidez humana. Que es tan argentina.